La mecánica cuántica, el ki, y la profecia autocumplida

Semilla

Imagen de Hans en Pixabay 


¡Hola! ¡Saludos y abrazos! 

No, no voy a entrar a desarrollar la teoría de la física cuántica (ahora mismo carezco de los conocimientos y capacidad intelectual necesaria 😂😂😂). 

Pero voy a citar lo que los tres ámbitos de conocimiento humano del titulo pueden tener algo en común. 

  • La física cuántica dice que "El observador modifica/altera/condiciona lo observado".
  • Los maestros orientales de meditación y artes marciales dicen que "El Ki (la energía) se manifiesta allí donde llevemos la atención". 
  • En psicología (y en el saber popular) se habla del efecto pigmalión o profecía auto cumplida, que podría resumirse como "Tus pensamientos pueden condicionar tus comportamientos, eso a los otros, y todo ello, el desenlace real de los acontecimientos". 
Como profe/entrenador/educador, procuro tener esto en mente, de manera que cuando me dirijo al alumnado, en general, y en individual, procuro enfocar mi comunicación de la manera más constructiva posible. 

¡Ojo! Constructiva es diferente de fantasiosa. Constructivo es reconocer el potencial presente para un escenario futuro realista donde el alumno o alumna presentan un comportamiento/actitud/logro positivo para éllos, y transmitirselo con respeto, cariño y realismo (realismo porque el potencial se suele desarrollar con trabajo, esfuerzo y perseverancia, todo ello ligado a la motivación). 

En general, ante una interacción con un chaval, ante una situación presente, solemos tener la elección de enfocarnos en el potencial positivo o negativo tanto del chaval, como de la situación. Esto no quiere decir que no haya que afrontar la situación en caliente y tomar las medidas que estimemos adecuadas (adecuadas, el concepto,... ¿Para mí?, ¿Para el chaval?, ¿Para ambos?, ¿Para el aula?,...), pero creo que estaremos de acuerdo en que la misma medida puede ser más o menos de efectiva y adecuada según como se presente (actitud, tono, razonamiento, honra a los implicados,...). 

A veces tratar a alguien comunicándole que presupones que lo va a hacer bien le ayuda a querer hacerlo bien, y a convencerse de que lo puede hacer bien, y vivecersa. 

Insisto, sin fantasías, pidiendo a cada uno hacer lo que puede hacer, y animándole a explorar lo que no sabe si puede hacer, sin lanzarle confiadamente a un fracaso natural (salvo que ese fracaso este previsto como parte del aprendizaje, en cuyo caso además, habrá que dejar puestas las semillas de aceptación, y perseverancia en la práctica, para un buen aprendizaje y mejora). 

Enfocarse en el potencial positivo que se perciba dentro del contexto específico de ese momento, e intentar crear un escenario para desarrollar un potencial de esfuerzo y logros positivos. Donde el intento tenga sentido, y los fracasos pasados sean experiencias no limitantes de aprendizaje. Una chispa de mechero

Abonar el terreno, y dejar semillas que puedan brotar. El resto lo pone cada persona, y su entorno. 

Bonus: 

Otro fuerte abrazo, pasad estupendos momentos con vuestros seres queridos 🤗